Una joven promesa
Publicado: 29 Mar 2010, 23:17
El Escarabajo de Jade fue creado hace muchos años, mucho tiempo antes del nacimiento de Sigmar. La leyenda dice que este objeto de increible poder perteneció al rey de Khemri más poderoso de la historia. Pero también dice que lo perdió, y que tras su desaparición, el rey cayó en la desgracia más terrible de todas. Su imperio se desmembró. Sus pirámides se derrumbaron. Sus lacayos le traicionaron. Sus herederos fueron asesinados. Y él fue enterrado vivo por sus antiguos lugartenientes.
Durante mil años, el Escarabajo cambió de manos cientos de veces, siempre con catastróficas consecuencias. Y finalmente, se perdió. Y durante más de tres mil años, permaneció oculto, perdido, en paradero desconocido. La leyenda del poderoso objeto se fue perdiendo en la historia, y nunca más se supo de él. Nunca hasta hace tres meses...
Noche del 29 de Sommerzeit de 2521, Aubentag, el Club de Caballeros de Marienburgo
La muegrienta sala de la taberna estaba llena de humo de pipa, como de costumbre. Las mesas estaban ocupadas por los clientes habituales, todos miembros de la honorable Liga de Caballeros Emprendedores. Un catayano jugaba una partida de dominó con tres hombres de aspecto poco amenazador. A poca distancia, en otra mesa, bebian y hablaban en voz baja un duo de musculosos matones. En general, la estampa era la habitual.
En una mesa apartada de la puerta, el joven y astuto Walbretch descansaba tras un duro día de trabajo. Si a pasearse por el Paleisbuurt y saquear un par de bolsillos se le podía llamar "duro día de trabajo". Con una pinta de cerveza fría y un plato de queso frente a él, no podía pedir más. Llevaba un buen rato sentado cuando un hombre se le acercó y se sentó en una silla junto a él.
- Wal, que bien que te veo. -era Antonius Patijn, un amigo y compañero en el negocio- ¿A que no sabes qué? -Antonius sonrió ante la expresión de desconcierto de Wal- Nos han contratado para un trabajo. No me han dado muchos detalles, por no decir que no me han dicho nada, pero lo que si me han dicho es que esperemos a media noche, en el callejón que hay tras el Loto Dorado, que allí se reunirán con nosotros y que nos darán instrucciones. ¿Qué me dices Wal? Yo creo que podríamos intentarlo.
FDI: Adelante Wal, demuestra de lo que eres capaz
Durante mil años, el Escarabajo cambió de manos cientos de veces, siempre con catastróficas consecuencias. Y finalmente, se perdió. Y durante más de tres mil años, permaneció oculto, perdido, en paradero desconocido. La leyenda del poderoso objeto se fue perdiendo en la historia, y nunca más se supo de él. Nunca hasta hace tres meses...
Noche del 29 de Sommerzeit de 2521, Aubentag, el Club de Caballeros de Marienburgo
La muegrienta sala de la taberna estaba llena de humo de pipa, como de costumbre. Las mesas estaban ocupadas por los clientes habituales, todos miembros de la honorable Liga de Caballeros Emprendedores. Un catayano jugaba una partida de dominó con tres hombres de aspecto poco amenazador. A poca distancia, en otra mesa, bebian y hablaban en voz baja un duo de musculosos matones. En general, la estampa era la habitual.
En una mesa apartada de la puerta, el joven y astuto Walbretch descansaba tras un duro día de trabajo. Si a pasearse por el Paleisbuurt y saquear un par de bolsillos se le podía llamar "duro día de trabajo". Con una pinta de cerveza fría y un plato de queso frente a él, no podía pedir más. Llevaba un buen rato sentado cuando un hombre se le acercó y se sentó en una silla junto a él.
- Wal, que bien que te veo. -era Antonius Patijn, un amigo y compañero en el negocio- ¿A que no sabes qué? -Antonius sonrió ante la expresión de desconcierto de Wal- Nos han contratado para un trabajo. No me han dado muchos detalles, por no decir que no me han dicho nada, pero lo que si me han dicho es que esperemos a media noche, en el callejón que hay tras el Loto Dorado, que allí se reunirán con nosotros y que nos darán instrucciones. ¿Qué me dices Wal? Yo creo que podríamos intentarlo.
FDI: Adelante Wal, demuestra de lo que eres capaz